11 de diciembre del 2025. Cuba.- Cuba enfrenta una grave crisis energética, con más de la mitad del país sufriendo apagones simultáneos durante el pico de máxima demanda, según informó la empresa estatal Unión Eléctrica (UNE). La situación ha provocado un aumento en las protestas sociales en la isla.
Desde el viernes pasado hasta el martes, el país registró afectaciones consecutivas superiores al 60% de la demanda, una de las cifras más altas documentadas desde 2022. La UNE estima para el horario pico una capacidad de generación de 1,540 megavatios (MW) frente a una demanda de 3,300 MW, resultando en un déficit de 1,760 MW.
La raíz del problema es una crisis energética severa que se arrastra desde mediados de 2024, marcada por la falta de divisas para importar combustible necesario y las frecuentes averías en sus obsoletas centrales termoeléctricas. Actualmente, siete de las dieciséis unidades termoeléctricas están fuera de servicio. Además, cerca de un centenar de centrales de generación distribuida están paradas por falta de combustible o lubricante.
Mientras que expertos independientes señalan que la crisis es estructural y se debe a una infrafinanciación crónica del sector, el Gobierno cubano atribuye la situación al impacto de las sanciones estadounidenses, acusando a Washington de “asfixia energética”. Los apagones han contribuido a que la economía cubana se contraiga un 11% en los últimos cinco años y han sido el detonante de las crecientes manifestaciones ciudadanas.
