El asentamiento humano en el territorio totonaco que hoy es Xalapa, parece ser más remoto que 1313, como tradicionalmente se ha afirmado, sin embargo mientras esa fecha sea la oficial, la celebración merece todo el apoyo de los xalapeños.
Nuestra ciudad es una población con historia interesante., existen datos bien fundados en investigaciones y hallazgos arqueológicos merecedores de innegable crédito.
El maestro Fernando Winfield Capitaine, destacado investigador de la Universidad Veracruzana, en su libro “Historia de Xalapa desde la época precortesiana hasta nuestros días”, publicado por el Gobierno Municipal de Xalapa en 2007 menciona el hallazgo de Don Alfonso Medellín Zenil, respetado arqueólogo, quien en 1973 describió los restos de cerámica encontrados en la Cueva de la Orquídea, ubicada en la avenida Miguel Alemán, corresponden a un recinto totonaco sagrado fechado en el “Horizonte arcaico” del periodo preclásico medio, (años 5000 a 1800 antes de Jesucristo).
El maestro Medellín Zenil también describió en 1973 una tumba en una zanja en la zona de las instalaciones de agua potable, ubicadas en la avenida Xalapa, donde se encontraron restos de una mujer correspondientes al Horizonte postclásico que comprende los años de 1500 a 1100 años antes de Cristo.
El eminente historiador xalapeño Dr. Gilberto Bermúdez Gorrochotegui, en su artículo “Orígenes de Xalapa” publicado por la Universidad Veracruzana, afirma que algunos de los restos arqueológicos encontrados en Xalapa, proceden de antiguos asentamientos conocidos como “Macuilxochitlán” (lugar de cinco flores), de donde probablemente procede el designio de “Ciudad de las flores”, este asentamiento ya se menciona en el Códice de Chapultepec, del siglo XVI.
El siguiente texto del historiador Acuña, citado por el maestro Paulo César López Romero del Instituto Investigaciones histórico-sociales de la Universidad Veracruzana, en su artículo titulado “Fundación del asentamiento de Xalapa; ilusiones decimonónicas y nueva propuesta historio gráfica” dice, “Constantino Bravo de Lagunas, alcalde mayor de Xalapa, registró en 1580 que el pueblo existía antes de la llegada de los españoles y su fundación habría ocurrido 200 años antes por indígenas provenientes de Quimixtlan sin mencionar, otros barrios”.
El maestro López Romero continúa: “Tres siglos después, en 1869, Manuel Rivera Cambas afirmaba que Xalapa fue fundada bajo forma de barrios indígenas sin mencionar sus nombres, para el curso del siglo XX estos barrios aparecieron ya con los nombres conocidos. Estas informaciones divergentes me han llevado a cuestionarme la legitimidad de la fecha registrada para la fundación de la ciudad de Xalapa.
La respuesta a estas preguntas requiere de un nuevo análisis historiográfico que permita comprender el origen de una población, a la cual se le festejaron setecientos años de continua existencia.” Interesante, digno de investigarse.
El maestro Winfield Capitaine, en su obra mencionada, describe el asombro del investigador norteamericano Thomas Gage, cuando llegó a Xalapa en 1634, y encontró un pueblo de 2000 habitantes entre españoles e indios, mencionando al Convento de San Francisco ocupado por seis frailes, relatando que esta pequeña ciudad fue erigida como cabeza del Obispado, después de la separación del de Puebla de los Ángeles, el pueblo Xalapa era próspero y el nuevo Obispo llegó a recibir rentas de hasta diez mil ducados anuales gracias a la riqueza de los terrenos fértiles productores de abundante trigo autóctono y español.
Un aspecto interesante de la ciudad de Xalapa es la iglesia Catedral, construida a partir de 1776, siendo Virrey de Nueva España, Don Antonio María Bucareli y Ursúa, su construcción fue producto de cambios y criterios arquitectónicos, creándose una obra con diversos estilos artísticos, debido a lo prolongado de su edificación, sin embargo en ella recibimos un legado de un templo querido con entraña, por lo xalapeños de origen y corazón.
Nuestra catedral tiene un bello altar, una nave monumental, solo una torre y la segunda apenas insinuada, debe esta peculiar característica a que en el área donde se debió construir la torre, existe un gran túnel subterráneo que haría la construcción , larga, costosa y delicada arquitectónicamente, y así se ha quedado, pero es una efigie ícono de nuestra ciudad.
Presento a usted el plano sobre el que se iniciaron los trabajos para la construcción de la que hoy es nuestra catedral, fechado en 1776, obtenido del libro “Monumentos coloniales de Xalapa,” Ed. Citlaltepetl, de Ludivina Gutiérrez, 1970.
En la capilla de Santiago Apóstol y la Parroquia de Nuestro señor del Calvario se pueden admirar tres hermosos altares dorados estilo barroco, procedentes del Convento de San Francisco en Xalapa, siglo XVIII, son imágenes de Santiago Apóstol, San Francisco de Asís y San Juan Nepomuceno, sobre este tema existe el excelente artículo, “Presencia colonial en Xalapa, los retablos del Monasterio de San Francisco”, editado en la revista “La palabra y el hombre, de la Universidad Veracruzana, publicado en la página web de esta revista.
El museo de antropología de Xalapa (MAX), considerado entre los mejor dotados y organizados del mundo, nos muestra la cultura y sensibilidad artística de nuestros antepasados regionales, el Jardín de las Esculturas complementa este espectáculo antropológico, que enorgullece a las veracruzanos.
El muralismo tiene relevante presencia en nuestra ciudad, en diversos sitios se pueden contemplar obras de Alberto Beltrán, Teodoro Cano, Ramón Alva de la Canal, José Chavez Morado y algunos otros de talento y renombre similares.
Es notable la calidad artística de las fotografías del Museo de Antropología, el Jardín de las Esculturas y la imagen del mural, con que engalanamos nuestras páginas, son obra del Dr. Héctor Montes de Oca, artista xalapeño de la imagen en el escenario internacional.
Xalapa es un cofre repleto de tesoros histórico y artísticos.
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