El mundo de la gastronomía está de luto tras el fallecimiento de la famosa repostera Myriam Camhi, quien consiguió crear una de las marcas más importantes y queridas de Bogotá y Colombia.
La señora Camhi, quien vendió su primer merengón de guanábana con porciones para 10 a 12 personas en 1982, se convirtió con el tiempo en una pionera de la repostería ‘gourmet’.
Ese postre se hizo tan famoso que comenzó a venderlo en el garaje de su casa y luego llevó sus delicias a hoteles, que descubrieron otros sabores gracias a ella.
Myriam Camhi, que cumplió 80 años el pasado 25 de diciembre, nació en Buga y estudió en el Liceo Benalcázar de Cali, pero luego se trasladó a Bogotá. Estuvo en el negocio de los muebles, pero tomó luego un camino más dulce.
Esta famosa repostera empezó sus labores en el garaje de su casa, desde donde vendía sus preparaciones a amigos y conocidos.
Sin embargo, con el pasar del tiempo el garaje desde el que despachaba se fue quedando pequeño ante la demanda de productos, por lo cual al poco tiempo decidió tomar en arriendo un espacio en la cocina de un restaurante, lo que le permitió aumentar la producción y ampliar el mercado de sus productos. En el 2000 abrió su primer café en la capital del país y, posteriormente, se trasladó a la calle 81 con carrera 8.ª, donde hoy funciona su sede principal y desde donde salen sus productos a diferentes partes del país.
“Era una mujer muy tímida, pero a la vez muy sencilla y querida por todos”, le contó a EL TIEMPO su hija Denise Simhon Camhi.
“Ella, con sus recetas familiares y su dulzura, abrió un camino en una época en la que no había tantas opciones en este tipo de repostería (…). De hecho, muchas de las niñas que comenzaron con nosotros en el garaje de la casa aún siguen ayudándonos, manteniendo esas recetas y su memoria, porque mi mamá inspiraba mucho”, agregó.
“Ella, con sus recetas familiares y su dulzura, abrió un camino en una época en la que no había tantas opciones en este tipo de repostería (…)”
De su marca son famosos la torta W, el Napoléon de arequipe, su Choco Flan, la torta de zanahoria o el tiramisú, dentro de una ya amplia carta en la que también hay ahora desayunos, tortas de sal, ensaladas y otros platos especiales.
Camhi dejó más de 3.000 recetas que hoy deleitan a los colombianos, especialmente en cuanto a pastelería ‘gourmet’.
De hecho, según le dijo su hija a este diario, la idea es seguir y desarrollar la marca que lleva el nombre de su madre; por eso, aseguró que el legado de Myriam Camhi continuará.
“Este sigue siendo un negocio familiar y estamos en el día a día y, bueno, trabajando para que siga por muchos años”, finalizó Denise Simhon Camhi.