De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI) y en conjunto con el Índice de Precios al Consumidor, en la primera mitad de junio la inflación en México desaceleró un 5.18%. Estos datos son un enorme contraste con los presentados en 2021, donde en el mes de marzo los precios al consumidor aumentaron un 4.12%.
Estos datos pudieron obtenerse mediante un sondeo llevado a cabo por Reuters a través de distintos mercados, sin embargo, en los pronósticos se esperaba un incremento del 5.30% aunque los datos actualmente recibidos siguen siendo favorables.
Finalmente, es importante señalar que dichos cambios en la consolidación económica han generado un mayor impacto en la industria alimenticia y tabacalera, pues los precios incrementaron en 10.67%, terminando de aplicarse en restaurantes, hospitales y servicios turísticos al consolidar un aumento del 6.63%.