El Internet, una de las maravillas de la actualidad, proporciona información inmediata sobre cualquier tópico por raro y complejo que sea, Google ha sido un punto de partida de esta vertiginosa carrera tecnológica.

En 1996,  Larry Page y Sergei Brin, actuales ejecutivos de Google, eran  estudiantes de informática en la Universidad de Stanford y no estaban satisfechos con diferentes nombres que habían dado a su buscador, creado desde 1996, cuando el Internet tenía solo cinco años de haber aparecido y era un desastre debido a su desorganización y caótico crecimiento ante la aparición de innumerables redes de informática.

En matemáticas Gugol es un número infinito, igual a 10100 es decir 10 seguido de cien ceros, es un número mayor al de todos los átomos del universo conocido. Sean Anderson amigo y compañero de los creadores del sistema,  sugirió este nombre pero al mencionarlo inicialmente se equivocó y dijo Google, el término agradó a los creadores del buscador y asi se quedó para siempre.

Hoy usamos Internet y sus múltiples buscadores en nuestra rutina diaria, es muy sencillo y casi tan vital como respirar. La importancia actual del Internet es enorme, la humanidad ya no podrá prescindir de este recurso magistral.

En 1991, hace apenas treinta y un años, la búsqueda de  la explicación de un concepto nos obligaba a recurrir al diccionario y diversas fuentes bibliográficas que si estaban traducidas al español, tendrían cuando menos dos años de antigüedad. La pesquisa era prolongada y tediosa. Hoy cualquier información la obtenemos en unos segundos y con actualidad de ayer, no tanto en portales abiertos al público como a través de medios informáticos contratados mediante pago, en que la información obtenida es de última hora, primera línea y en medios de prestigio internacional.  Es asombrosa la evolución que hemos vivido los internautas, sin embargo esto está causando un sutil y progresivo aislamiento de los seres humanos, principalmente en el seno familiar.

Otro importante recurso de comunicación es el teléfono celular. Este artefacto tiene historia más antigua,  en 1970  Martin Cooper diseñó el primero, era un aparato grande,  poco estético, solo servía para hablar y su batería de poca duración. . El primer teléfono celular de la historia, ya más parecido a los actuales lo fabricó Motorola en 1983, pesaba 780 gramos y también poco atractivo. Sin embargo en  1984 se habían vendido 900 mil.

Hoy los celulares poseen funciones que hace diez años se antojaban lejanamente futuristas, ya no es un artefacto simplemente para hablar,  es un recurso indispensable en la actividad cotidiana  de todo estrato socio económico.

Estos teléfonos son inseparables de las personas. El WhatsApp es imprescindible. Entre mensajes de texto, llamadas e  internet brindados por los celulares, la gente se ensimisma e ignora su entorno. El binomio Internet-celular se han constituido en una adicción psicoemocional cien por ciento.

 Es cotidiano ver en sitios de reunión, restoranes, convivios familiares, hasta en cines, a personas absortas en la pequeña pantalla del celular o iPod, ignorándose entre sí y a  su entorno circunstancial. Si alguno de ellos, recibe contestación monosilábica y la concentración reinicia. En los hogares es la misma escena. La elevada evolución tecnológica al alcance de industrias, instituciones sociales y ciudadano común ha empezado a ser un factor de distanciamiento entre los seres humanos.

La Robótica avanza en el mundo. La empresa KUKA de México, subsidiaria de KUKA Roboter de Alemania comercializa importantes volúmenes de robots industriales, tiene entre sus clientes  empresas relevantes como Bayer, BMW, Airbus, Basf.  La subsidiaria  YASKAWA  Motoman de Aguascalientes  y en Apodaca Nuevo León., tiene una base instalada de más 35 mil robots en el continente americano. Este rubro, en el desarrollo de la economía mundial podrá causar desplazamiento del ser humano por máquinas cibernéticas inteligentes.

Actualmente la empresa TELSA, propiedad del multi millonario Elon Musk ha construido una robot humanoide llamado “optimus”, capaz de transportar objetos, acomodarlos en sitios determinados, regar plantas y se esta perfeccionando, es eléctrico accionado con baterías de 2.3 kWh, mide 1.73 y pesa 57 kilos.

En medicina la incursión de los Robots ya es una realidad, permite una impecable programación  y precisión exacta en el desempeño de áreas de alto riesgo donde no se permiten errores humanos, como el más mínimo “temblor de mano”. Actualmente se cuenta con Robots en tres fases de atención médica, 1) Robots quirúrgicos, 2) Robots de rehabilitación y prótesis y 3) Robots de almacenaje y administración exacta en dosis y tiempo de medicamentos.

Pues bien ahora todo por internet, WhatsApp o Robots, desde  vender comprar, tomar acuerdos,  sin desplazarse. Ahora la Robótica más exacta y eficaz que el ser humano en eventos complicados que exigen precisión. Dentro de cincuenta años, el ser humano será un ente anulado por la tecnología humanoide que habrá sustituido gran número de actividades esencialmente humanas.  La mujer y el hombre se habrán convertido si no un servidor, sí un simple ejecutor de la orden intelectual del humanoide.

La tecnología atrae confort, facilita las acciones humanas haciéndolas inmediata y certeras, pero se convierte vertiginosamente en un factor de desplazamiento del afecto interpersonal e importancia del ser humano como base del trabajo, manual, técnico que entre más especializado, mas deletéreo se vuelve para la importancia del hombre y la mujer en el desempeño del trabajo bien remunerado, asi como en la salvaguarda de la salud al favorecer  el sedentarismo facilitado por  la comodidad tecnológica.

Otra perspectiva que tenemos enfrente, digna de meditar profundamente en ella.

 hsilva_mendoza@hotmail.com

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