Ciudad de México.- Ulises Ruíz Ortiz, militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y exgobernador de Oaxaca, pidió la renuncia de Alejandro Moreno y del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) para dar paso a una nueva dirigencia y comenzar la reconstrucción del partido.
“Los priistas de verdad exigimos la renuncia inmediata de Alejandro Moreno y de todo el CEN, para dar paso a una nueva dirigencia que, ahora sí, sea electa democráticamente para comenzar de nuevo la reconstrucción del partido y quienes resultaron electos ante el Congreso de la Unión deben exigir desde ahora que el liderazgo en la cámara de la fracción se determine igualmente en forma democrática”, dice el comunicado firmado por Ulises Ruíz Ortiz.
En todos los rincones del país ha sonado la inconformidad del priismo con su dirigencia, por lo que invitó a difundir mediante cualquier medio el rechazo hacia Alejandro Moreno, “Alito”, y la dirigencia actual, y así seguir el camino hacia un proyecto comprometido con México y ajeno a intereses propios.
“Invitamos al priismo a manifestar abiertamente su rechazo a ‘Alito’ y la dirigencia actual, mediante sus redes sociales y todos los medios a su alcance. Sólo así atenderán la urgencia de irse para dar paso a una nueva dirigencia comprometida con México y ajena a los intereses”, afirma el escrito.
Estas declaraciones llegan luego de que el PRI no ganara ninguna de las 15 candidaturas en disputa, además perdió ocho gobiernos estatales para conservar cuatro entidades de las 32 que conforman la República mexicana, por lo que este año es considerado como uno de los más humillantes para el partido.
El escrito afirma que desde la lección de 2018 se debió dar inicio a una transformación integral desterrando las prácticas arcaicas como simulación, dedazo y grosera imposición de dirigentes y candidatos.
“Los ‘dueños del partido’, los patrones de ‘Alito’, siguen sin entender que la ciudadanía se cansó de los abusos, de la corrupción, de la prepotencia que les caracteriza y, sin reparar en el rumbo que está tomando México, una mayoría indignada prefiere votar a ciegas por un falso mesías que desde su residencia palaciega pregona una transformación que nadie entiende”.
Las quejas por la falta de recursos fueron constantes entre la mayoría de los candidatos “mientras ‘Alito’ se paseaba por el país en aviones pagados con las prerrogativas, las campañas languidecían de inanición, sin el apoyo de un CEN omiso y ausente”.
“Hoy parece tarde. En una burda maniobra se entregó el partido a ‘Alito’ y sus aliados y éstos, no podía ser de otra forma, hicieron lo mismo a partir de entonces repartiéndose el botín mafiosamente adquirido entre amigos, familiares y cómplices, como si estuviéramos en los años 70 cuando ser candidato era garantía de triunfo y como si el CEN fuera patrimonio de los mismos de siempre”.
(Nota de Julio Astillero)