Por: Rossana P. Polanco Bremont
(Polanckova Sports Photography)
Cd. de México.- Al inicio del año vivimos un gran debate en el mundo deportivo, este fue protagonizado por Novak Djokovic y su controversial situación derivada de sus creencias y libertades respecto la vacunación. Un día antes del inicio del torneo, el gobierno de Australia lo regreso a casa y le impidió disputar el torneo y defender su titulo. Novak no solo se preparaba para conquistar un Grand Slam más, era el candidato favorito por conquistar el torneo por decima ocasión y ser el primero en desempatar el record de Grand Slams ganados entre los miembros del Big3.
Muchos aficionados del deporte expresaron su descontento con el veredicto del juez en contra de Djokovic y cuestionaron incluso la validez del torneo sin la presencia del serbio. El evento ha terminado y aunque el resultado final no sea del agrado de algunos, fue un gran torneo para todos los que amamos este deporte.
Djokovic tuvo un asombroso 2021 y pintaba a que haría historia al ganar los 4 grandes del año y el oro olímpico, pero no fue así. El oro le fue arrebatado por Zverev y la oportunidad de alguna medalla por Pablo Carreño Busta. En US OPEN, tuvo la oportunidad de ganar su cuarto GS del año y no lo consiguió. Un joven ruso 9 años menor que el serbio, se lo impidió.
Novak no era el único anotado en la carrera, Nadal y Federer también estaban anotados en la competencia, pero debido a algunos problemas físicos que ambos presentaron durante la segunda mitad del año, se vieron obligados a no competir. Esta situación le dejó el camino libre al serbio, que parecía estar solo en la carrera y listo para romper otro record para ser parte de la historia del deporte como el máximo ganador de Grand Slams, pero no resultó como lo planeó.
Tras dos oportunidades perdidas de Novak Djokovic en el año, el serbio estaba motivado en que Australia 2022, tendría otro chance más para desempatar el record de Grand Slams, pero tampoco tuvo éxito. Al contrario, lo que empezó como una campaña por ser reconocido como el GOAT, terminó en un conflicto mayor. Djokovic se vio envuelto en una serie de errores den juicio que le causaron la cancelación de su visa, la deportación e impedimento de viajar a Australia por al menos 3 años, el no disputar el torneo en el que tiene el record de títulos conquistados y el dejar la puerta abierta a uno de sus adversarios de lograr el tan soñado titulo 21 de Grand Slam.
Al inicio del año, cuando todo el conflicto se desató, para muchos no figuraba un riesgo el ser rebasado en títulos de Grand Slams, puesto que Federer no competiría hasta mediados del año y Nadal apenas estaba regresando a competir después de un receso de meses por una lesión y el haber contraído Covid en su retorno al circuito. El escenario más pesimista para el serbio era perder la cima del ranking y dejársela al ruso Daniil Medvedev, que lo venció en Nueva York y le impidió lograr la hazaña de ganar los 4 títulos en el año y lograr el desempate tan buscado por el Big3.
Dentro del debate por la situación que vivió el serbio, un jugador compartió su opinión que fue criticada y percibida como falta de compañerismo. El jugador tenia razón: El Abierto de Australia era mucho más importante que cualquier jugador y que seria un gran torneo con o sin el (serbio). Pocos imaginamos que este personaje sería el campeón y nuevo líder en títulos de Grand Slams.