Durante el fin de semana, alrededor de 4 mil indocumentados de diferentes nacionalidades partieron de Tapachula hacia la Ciudad de México a manera de protesta por el incendio ocurrido en la estación migratoria de Ciudad Juárez, Chihuahua, y que cobró la vida de 40 migrantes.
Los manifestantes dijeron que emprendieron esta caravana luego de pasar meses esperando a que el Instituto Nacional de Migración (INM) les otorgara documentos, pero no ha habido respuesta.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos solicitó a dependencias de gobierno medidas cautelares, a fin de salvaguardar la seguridad de los manifestantes, en especial de menores, mujeres embarazadas, adultos mayores, con problemas de salud y con discapacidad.