Por Darío Pale
10 de enero de 2025.Xalapa, Ver.- Ante los cuestionamientos sobre la Ley de Deudores Alimentarios y las medidas para obligar a quienes incumplen con la pensión alimenticia, el arzobispo de Xalapa, Jorge Carlos Patrón Wong, señaló que, aunque la legislación puede ser una respuesta, no es la solución de fondo. La verdadera transformación, dijo, debe surgir de la educación y de la formación humana.
“Hay cosas que no se pueden imponer por ley… La ley puede ser una respuesta, pero no es la respuesta. Necesitamos un camino de formación y concientización para quienes no obran humanamente”, expresó.
Patrón Wong lamentó que algunas personas no solo incumplen con sus responsabilidades parentales, sino que incluso violentan o desprecian a sus hijos.
“La parte más triste es cuando un corazón ha perdido su propia humanidad: no ama a quien debe amar, los violenta o se olvida de ellos”, señaló.
Sin embargo, destacó que en muchas familias veracruzanas siempre surge alguien que ocupa el rol de apoyo cuando falta el padre: madres, abuelas, abuelos u otros familiares que sostienen la crianza.
“A las mamás no las vemos solas. Tienen a Dios, a la Virgen de Guadalupe y a su propia familia que las ama y las sostiene”, afirmó.
El arzobispo subrayó que, ante el abandono, muchas mujeres desarrollan una fuerza y un amor extraordinarios.
“Hay un mal real, pero ese mal ha provocado en muchas mamás niveles altísimos de amor que nosotros llamamos santidad. Son personas santas”, explicó. Comparó este tipo de amor con el sacrificio representado por la cruz: la cruz da vida. Quien da la vida por sus hijos se identifica con Cristo. Aunque haya sufrimiento, ese amor tiene un sentido. Los hijos lo saben, y por eso dicen: ‘Tengo una mamá santa’”.
Al abordar directamente la ley que sanciona a deudores alimentarios, Patrón Wong enfatizó que, en un mundo ideal, la pensión alimenticia no debería existir por imposición, sino como expresión de amor hacia los hijos.
“Cuando la ley se impone es porque no se ha hecho un proceso de formación o educación. La ley nos dice que hay deformidad en la sociedad. Una sociedad educada usa sus leyes en la mínima expresión”, señaló.
Añadió que el aumento de leyes punitivas o la necesidad de más cárceles refleja una falla social profunda. “El aumento de cárceles nos dice que falta educación, falta formación. Ninguna ley detiene el mal si no se hace un camino humano”.
El líder de la Iglesia Católica en Xalapa subrayó que la discusión jurídica es necesaria, pero insuficiente:
“Frente a una ley se puede discutir, pero nunca olvidemos que no es la solución completa si no hay educación y formación”, enfatizó, es una gran tarea para todos. Realmente debemos preguntarnos si estamos educando y formando. Esa es la clave”.
