Un equipo de científicos estadounidenses generó revuelo ético por el diseño y creación de pseudoembriones, a partir de células madre artificiales.
Los límites de la vida humana han generado polémica durante siglos. Desde la perspectiva del estudio biológico, uno de los intereses más delicados de investigación está relacionado con los procesos de gestación. Recientemente, un equipo de científicos lograron crear “pseudoembriones“, lo que despertó un revuelo ético incendiario entre estudiosos de diversas disciplinas.
Un esfuerzo de “reprogramación” de células humanas
Los “pseudoembriones” diseñados en laboratorio toman como base células de la piel humana. El equipo de científicos encargados de desarrollar esta tecnología biológica reprogramaron sus estructuras elementales. El objetivo de este esfuerzo fue lograr que se parecieran a las de embriones humanos, de manera que se pueda estudiar el desarrollo de los procesos de gestación de nuestra especie.
De esta manera, de acuerdo con los investigadores, se podrá expandir el campo de conocimiento con respecto a patologías de desarrollo humano, enfermedades genéticas e incluso, encontrar alternativas para la infertilidad. Con la información que arrojó su estudio, nuevas soluciones para estos padecimientos podrían construirse en el corto plazo.
Publicado en Nature, el artículo detalla la hazaña de crear estructuras muy similares a embriones en etapa de blastocisto: un huevo humano sin fertilizar. Fue justamente este punto el que causó larga, amplia y profunda discusión en el terreno ético de crear modelos similares a los humanos, a partir del cultivo de órganos humanos en laboratorio.
Órganos humanos producidos en laboratorio
Los órganos generados en laboratorio se conocen como “organoides”. En las últimas cinco décadas, el desarrollo de estas tecnologías ha superado los límites estructurales de enfermedades como el cáncer, y ha ayudado a la medicina a combatir otras enfermedades terminales.
Hoy en día, es posible extraer células madre directamente de los tejidos de los órganos que se desean reproducir artificialmente. Los investigadores encargados de crear los pseudoembriones dieron un paso más allá, generando ellos mismos las células madres necesarias en el laboratorio directamente, según detalla The Conversation:
“Si bien las células madre pueden revelar mucho sobre cómo se forman los órganos, la investigación hasta ahora ha proporcionado poca información sobre la compleja interacción entre el embrión en desarrollo y el revestimiento del útero necesario para establecer y mantener un embarazo”.
En este caso, se utilizaron células madre pluripotentes de seres humanos, de manera que pudieran replicarse aspectos específicos del desarrollo de un embrión. A estas células cultivadas se les llamó “iBlastoides“. Aunque son estructural y funcionalmente similares a los naturales, tiene anomalías significativas de crecimiento.
Restricciones y cuestionamientos éticos
Generar “embriones modelo” a partir de células madre cultivadas artificialmente es problemático, sobre todo, a nivel ético. Quienes apoyan su creación y diseño argumentan que podría aportar información valiosa para curar ciertas enfermedades de raíz, así como erradicar problemas genéticos.
Los más escépticos sugieren que implementar la edición genética podría traer problemas de sobrepoblación a la larga, si no se maneja con el cuidado necesario. Aunque el desarrollo de estas formas de vida artificiales está en etapas preliminares, el cuestionamiento con respecto a la vida prevalece.
Por el momento, este tipo de experimentación sólo está permitida a nivel científico, controlado en un laboratorio. De ninguna manera es comercializable todavía. Por el contrario, según los investigadores, “cualquier intento de usarlo para establecer embarazos en humanos o animales debe estar estrictamente prohibido“.