Después de un receso de temporada, la Fórmula Uno comenzó la campaña más larga de su historia con el Gran Premio de Bahrein que en esta ocasión tendrá 24 carreras.
En este sentido, el arranque de ‘Checo’ fue tranquilo, manteniendo su noveno lugar mientras Norris adelantaba a Leclerc para tomar el liderato. En la vuelta 4, Pérez ejecutó su primer adelantamiento al superar a Esteban Ocon en la curva 12, avanzando al octavo lugar. Su avance continuó, aprovechando el abandono de Piastri en la vuelta 10 para alcanzar la séptima posición.
A pesar de los esfuerzos de Pérez, no pudo poner en aprietos a Russell, quien presuntamente excedió los límites de pista sin sanciones. ‘Checo’ ingresó a pits en la vuelta 18, estratégicamente cambiando a neumáticos medios, lo que lo colocó en el décimo lugar. A partir de ahí, su ascenso fue evidente, adelantando a Russell en pits en la vuelta 22 y avanzando al quinto lugar tras la parada de Leclerc.
El equipo Red Bull llamó a Pérez para su segunda detención en la vuelta 38, cambiando a neumáticos duros. A pesar de sufrir con el ritmo, Pérez logró mantenerse en la sexta posición y, en una maniobra inteligente en la vuelta 53, superó a Leclerc en la curva 1 para asegurar el quinto lugar y obtener 10 valiosos puntos.
Con este resultado, Pérez se consolida en la clasificación general, resistiendo la amenaza de Lewis Hamilton por el subliderato en el campeonato mundial de pilotos.
En una gran actuación, el tapatío se alzó con el segundo lugar, solo por debajo de Verstappen.