03 de diciembre del 2025. Xalapa, Ver.- Este 30 de noviembre de 2025 inicia el Adviento, el periodo que marca el arranque del nuevo año litúrgico y que, a lo largo de cuatro domingos, invita a millones de creyentes en el mundo a detenerse, respirar y preparar el corazón para la Navidad. Este tiempo se extiende hasta la tarde del 24 de diciembre, cuando comienza la celebración del Nacimiento.

El Adviento —del latín adventus, “venida”— no es únicamente una cuenta regresiva, sino un tiempo de expectativa profunda: recuerda la espera por el nacimiento de Jesús en Belén y, al mismo tiempo, mantiene viva la esperanza de su segunda venida. Es un periodo que, más allá del calendario religioso, propone una forma distinta de habitar diciembre: con introspección, calma, oración y apertura interior.

Entre los símbolos más representativos se encuentra la Corona de Adviento, elaborada con ramas verdes y cuatro velas que se encienden cada domingo. Tradicionalmente, tres son moradas y una es rosa. Cada luz representa un valor a cultivar: esperanza, paz, gozo y amor. Su encendido semanal se ha convertido en un ritual que acompaña reflexiones, lecturas y momentos de recogimiento tanto en iglesias como en hogares.

Las fechas de los cuatro domingos —30 de noviembre, 7, 14 y 21 de diciembre— funcionan como pequeñas estaciones espirituales que marcan el avance hacia la Navidad. Y aunque las celebraciones difieren entre comunidades, todas comparten un mismo espíritu: prepararse interiormente para recibir. En un mundo acelerado y lleno de estímulos, el Adviento llega casi como un contrapunto necesario: un recordatorio de que el tiempo también puede vivirse con profundidad, pausa y sentido.

Así, mientras las ciudades comienzan a encender luces y las familias preparan sus tradiciones, el Adviento se convierte en un llamado discreto pero contundente a reconectar con valores esenciales, a practicar la generosidad, y a recuperar la serenidad en medio de la prisa que suele acompañar a diciembre. Es, en esencia, el comienzo silencioso de la esperanza.

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