30 de septiembre del 2025.- La ex policía de investigación de San Luis Potosí, Rosalinda Ávalos, enfrenta una denuncia judicial después de denunciar públicamente al aspirante a juez Sabas Santiago Ipiña por presunto vínculo con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y por el asesinato de sus dos hijos en 2020.
El 11 de noviembre de 2020, los hijos de Rosalinda Ávalos, Daniela y Carlos, de 18 y 20 años, fueron ultimados en un ataque armado en su domicilio en la colonia La Lomita. Aunque la Fiscalía local anunció la detención de nueve personas, ninguno ha sido llevado a juicio hasta la fecha.
En febrero de 2025, Rosalinda Ávalos irrumpió en el Congreso de San Luis Potosí para denunciar a Ipiña por sus presuntos nexos con el CJNG y su implicación en el asesinato de sus hijos. Su testimonio llevó al comité de selección a retirar la candidatura de Ipiña para juez.
Sin embargo, Ipiña presentó una denuncia penal y civil contra Rosalinda Ávalos por abuso de autoridad, ejercicio indebido de la función pública y daño moral. Los testigos presentados por Ipiña incluyen a presuntos miembros del CJNG, lo que ha generado mayor preocupación por la seguridad de Ávalos.
Rosalinda Ávalos ha expresado temor por su vida y la de su hija, y ha solicitado mayor protección a las autoridades. La Fiscalía de San Luis Potosí le otorgó medidas cautelares, como vigilancia en su domicilio, pero Ávalos considera que estas medidas son insuficiente.
Organizaciones civiles y activistas han expresado su solidaridad con Rosalinda Ávalos y han denunciado la revictimización estatal y la falta de justicia en su caso. Su historia refleja la complejidad y el riesgo de denunciar vínculos entre autoridades y el crimen organizado en México.