Por Heidi Castellanos
19 de diciembre de 2024. Coatzacoalcos, Ver.- El flujo migratorio en el sur de Veracruz sigue aumentando, con un promedio de 100 a 120 personas atendidas diariamente en la Casa del Migrante de la Diócesis de Coatzacoalcos. Los migrantes avanzan apresurados hacia Estados Unidos, impulsados por la incertidumbre que genera el próximo cambio de gobierno en ese país.
Joel Ireta Munguía, encargado de la Casa del Migrante, señaló que los extranjeros sólo permanecen el tiempo necesario para comer, bañarse y descansar brevemente antes de retomar su trayecto:
Ahorita solamente entran a eso, a comer, a bañarse, a descansar un rato y en el mismo día salen, esperando que el tren pase. Lo que ellos quieren es llegar a la frontera lo antes posible, por el miedo a este nuevo gobierno de Estados Unidos, detalló.
En los bajos del puente de la avenida Uno, los migrantes esperan pacientemente la llegada del tren que los llevará al norte. Luis Enrique, un migrante cubano, expresó su deseo de llegar antes de fin de año, dicen que todos quieren estar en Estados Unidos antes del 20 de enero.
El 20 de enero no, se supone que con la bendición de Dios estaremos antes de fin de año allá, hay que conjugar prisa con calma, la prisa te lleva a cometer errores y lo que hace es atrasarte mucho más, expresó.
La incertidumbre sobre el futuro político en Estados Unidos es un tema recurrente entre los migrantes. Enderson, un joven venezolano, compartió su preocupación por las posibles restricciones que se avecinan, mismas que los ha impulsado a esta migración apresurada.
No sabemos qué tan difícil se ponga de aquí a que Trump tome el mandato como tal… él dice que no quiere migrantes ilegales. A lo mejor pueda que sea más difícil, en el sentido de más requisitos, y algunos sí vayan a entrar y otros no, pero el futuro es incierto, comentó.
En su paso por Veracruz, los migrantes reflejan su desesperación y temor ante un posible endurecimiento de las políticas migratorias, que podría complicar aún más su llegada a Estados Unidos. Por ahora, cada kilómetro recorrido es un paso más cerca de su meta, aunque el camino esté lleno de obstáculos y peligros.