Cd. de México.- El Papa Francisco asistió a la XXII Asamblea Plenaria de la Unión Internacional de Superiores Generales (UISG) en silla de ruedas, todo ello tras los fuertes dolores en la rodilla derecha que le impiden caminar correctamente.
Esta es la primera vez que el pontífice aparece en silla de ruedas ante el público, por lo que pidió perdón al no poder saludar a sus feligreses en la audiencia general y confesó ante ellos que pronto pasará el problema en sus rodillas.
El Santo Padre durante la asamblea solicitó ayuda para levantarse, sin embargo a duras penas y lo consiguió.
Asimismo el martes pasado el Papa Francisco expresó en una entrevista que desde hace ya mucho tiempo padece problemas en la rodilla derecha a causa de la rotura de un ligamento.
«Hoy me operarán con infiltraciones y ya veremos. Llevo mucho tiempo así, no puedo caminar. Hace tiempo, los papas solían caminar con una silla gestatoria. Hace falta un poco de dolor, un poco de humillación”, declaró el Santo padre en la entrevista.