Cd. de México.- Los beneficios de la práctica regular de actividad física no son solo para la apariencia externa pues cientos de estudios revelan la relación entre un cuerpo activo y un cerebro en forma.
Asimismo en una investigación llevada a cabo en ratones, se demostró como el cerebro es capaz de generar nuevas neuronas, y uno de los factores que favorece este proceso es precisamente el ejercicio de tipo aeróbico, (correr, nadar, yoga, baile, caminar).
Otro estudio realizado en el 2013 demostró que el ejercicio físico es unos de los más potentes aliados para contrarrestar la depresión, por la producción de una variedad de neurotransmisores y hormonas (entre los que se nombran la dopamina, serotonina y endorfinas) que te hacen sentir bien y que pueden mejorar tu estado de ánimo.
Una investigación llevada a cabo en el 2004 donde se observó el proceso de concentración en tres grupos de personas, las que estaban en forma, frente a las que no lo estaban, así como la de personas que habían empezado a entrenar pocos meses antes frente a las que llevaban una vida sedentaria, demostrando que no solo que la gente en forma se concentraba más fácilmente, sino también que el hecho de empezar a hacer ejercicio supone una mejora en la capacidad de concentración.
Un estudio llevado a cabo en el 2009, consistió en analizar decenas de personas que hicieron ejercicio en tres niveles de intensidad distintos durante diez semanas, demostrando que habían una relación directa entre la intensidad del ejercicio y la mejora de la flexibilidad cognitiva (función que permite pensar en varios conceptos a la vez).