Esta semana llegó a las salas de cine de Jalisco —Cinépolis— y todo México la cinta mexicana “Los días más oscuros de nosotras”, de la cineasta Astrid Rondero y la escritora Fernanda Valdez. El proyecto filmado en 2017 y protagonizado por Sophie Alexander-Katz y Florencia Ríos ha hecho todo un recorrido por festivales ganando reconocimientos y nominaciones.
En entrevista con EL INFORMADOR, compartieron las creativas y las actrices que luego de su estreno comercial, la cinta podrá verse en streaming: “Fer y yo llevamos muchos años de colaboración; de hecho, manejamos nuestras películas como una cosa coautoral. Esta película la desarrollamos a lo largo de varios años, es una cinta que tuvo mucho apoyo a nivel internacional. De hecho, tiene apoyos de varios lugares del mundo para poderla filmar. Entonces, en ese aspecto es una película muy querida, deseada y trabajada”, contó Astrid.
El filme relata la historia de vida “Ana Bastide” (Sophie) una arquitecta que regresa a su natal Tijuana a cerrar un ciclo, la atormenta el recuerdo de su hermana muerta. Por otro lado está “Silvia” (Florencia), una mujer que es la inquilina de “Ana” y que quiere comprar la casa que le renta. “Ana” se mudará frente a ella para espiarla y de pronto ambas se encontrarán dándose consuelo en medio de problemáticas personales en las que se verán inmersas.
“Curiosamente en este deseo mío de contar la historia de una mujer que regresa a su pasado y que tiene que enfrentarse con su realidad, como con aquello que dejó atrás, finalmente lo que me parece muy rescatable es que de pronto se integraron muchas otras creadoras que sintieron una pasión muy compartida por realizar esta película. Para Fernanda y para mí es el arranque de nuestra vida profesional en el cine, es nuestra primera cinta en conjunto y le tenemos un amor inmenso”, dijo Astrid, a lo que Fernanda la complementó al decir que tras este filme todas las creativas que participaron encontraron su lugar en el mundo.
La trama, desde la historia de vida de “Ana” y “Silvia” también retrata otros tópicos como la violencia de género, la diversidad sexual y otras aristas muy de la vida cotidiana y contemporánea. “Esta película está llena de tantas temáticas, podemos tener una conversación y una mesa de debate sobre alguna que se aborda en el proyecto; por ejemplo, el de las mujeres en la frontera, o el empoderamiento en el caso de ‘Ana’, quien es arquitecta y le toca hacer una obra gigantesca y trabajar en un mundo de hombres y en una profesión y en un lugar como Tijuana donde lo más ‘normal’ es que llegue a trabajar un arquitecto y no una arquitecta”, compartió Sophie.
Por su parte Florencia agregó que con lo que ella se queda de la película es la alerta de que cualquier mujer puede ser víctima de un feminicidio: “Y es algo rudo, porque cuando hicimos la película yo jamás pensé que pudiera estar cerca de esto, o que le pasara a alguien cercano. No tenía conciencia de que estábamos haciendo algo social, simplemente estaba haciendo las cosas que teníamos que hacer en ese momento”.
Sophie expresó que cuando un proyecto está en construcción, pues es responsabilidad de los creativos desarrollarlo e impulsarlo, pero toda vez que se lanza al público se vuelve universal, ya no es parte de quienes le dieron vida, en ese sentido señala que esta es una cinta pertinente con la actual realidad, “va a aportar fuerza al movimiento feminista mundial. Y cuando se dice ‘movimiento feminista’, no se refiere solo a las mujeres, es una filosofía de vida y la película lo explica muy bien”, finalizó.