El jefe del equipo de expertos de la Organización Mundial de la Salud, Peter Ben Embarek, dio a conocer este martes, que tras la investigación del origen del virus en la ciudad e Wuhan, China, se continúa señalando que el SARS-CoV-2 proviene de la mutación a través de un murciélago.
“Todo el trabajo que se ha hecho para identificar su origen continúa señalando a una reserva de este virus o de un virus similar en poblaciones de murciélagos”, afirmó Peter Ben Embarek.
Se destacan dos hipótesis entre las más probables de la transmisión del virus hacia el ser humano: ya sea través de un huésped animal intermediario, o por algún alimento congelado de la cadena fría; se descarta que el virus haya sido creado en laboratorio.
Tras la visita al Instituto de Virología de Wuhan y al mercado de mariscos de la ciudad, los miembros han señalado que la teoría de la creación del virus “es extremadamente improbable para explicar la introducción del virus en el ser humano”. Asimismo, los científicos siguen apuntando a los murciélagos como reservorio natural del coronavirus pero “aún no es posible identificar al reservorio animal intermedio”.
