Por Darío Pale
11 de julio del 2025. Xalapa, Ver.- Elementos de la policía municipal amedrentaron a reporteros que cubrían un accidente vehicular en la calle de Bolivia, llegaron tarde al percance y actuaron con prepotencia para retirarlos del lugar y querer acordonar los cuatro carriles, en lugar de apoyar a los elementos de Protección Civil.
Un nuevo caso de abuso de autoridad por parte de elementos de la Policía Municipal quedó evidenciado la noche del jueves, luego de que dos uniformados arribaron con evidente retraso al sitio de un accidente vial sobre la calle Bolivia, y lejos de apoyar en las labores de auxilio, se dedicaron a confrontar a reporteros que cubrían los hechos.
Cabe destacar que el percance ya había sido atendido por personal de Protección Civil, Cruz Roja, Cruz Verde, Aries, Escorpión y Arum, quienes actuaron de forma oportuna para brindar atención médica y asegurar el área.
Los rescatistas incluso hicieron recomendaciones a los medios de comunicación presentes para que se mantuvieran en una distancia prudente, sin obstaculizar las maniobras.
Pese a que la situación ya estaba bajo control, los policías municipales llegaron tarde y con una actitud desafiante. Al notar la presencia de reporteros, comenzaron a amedrentarlos sin justificación, cuestionando su presencia e intentando desalojarlos del lugar, a pesar de que se encontraban fuera del área de riesgo.
La confrontación verbal fue inevitable, los periodistas, quienes cubren este tipo de hechos como parte de su labor informativa, denunciaron el actuar prepotente y la falta de criterio de los uniformados, quienes parecían más interesados en tomarse fotografías para justificar su presencia ante su superior, el Capitán Eduardo Lara, director de la Policía Municipal.
A pesar de que llegaron tarde al accidente en lugar de apoyar a los elementos de protección civil municipal para poder lograr enderezar la unidad y permitir la circulación por esa vía tan transitada solo llegaron a ver e intentar acordonar el área.
“Llegan tarde, cuando todo está resuelto, solo para tomarse la foto y aparentar que están trabajando. Lo grave es que, además, buscan intimidarnos a quienes solo estamos haciendo nuestro trabajo”, señaló uno de los reporteros afectados.
Este incidente revive la preocupación del gremio periodístico por las constantes agresiones e intentos de censura por parte de autoridades locales, la libertad de prensa es un derecho que debe ser respetado, y actos como el registrado anoche representan una amenaza directa al ejercicio del periodismo.
Se hace un llamado al alcalde Alberto Islas para que revise el desempeño de sus elementos policiacos y se tomen medidas concretas ante conductas que, lejos de representar a una corporación profesional, exhiben la falta de preparación y sensibilidad de algunos de sus integrantes.
La labor de informar también salva vidas. Impedirla, es un retroceso para cualquier sociedad democrática.